Sarah White tiene 24 años y una técnica para atender a sus pacientes muy particular: los analiza mientras se va quitando la ropa. De esa forma logra desinhibirlos y que le cuenten todos sus secretos. La primera sesión es por Internet y sale 150 dólares.
Para algunas personas ir al psicólogo puede resultarles una experiencia traumatica o poco agradable. Y para convencerlas de las bondades de Freud o Lacan y conseguir relajarlos, Sarah White, una terapeuta de 24 años de Nueva York, ha decido atenderlas desnuda.
"Para los hombres en particular es más más atractivo. Si Freud utilizó la libre asociación, yo uso la desnudez", explica Sarah.
La primera sesión es por Internet y cuesta 150 dólares. Después de este primer contacto, la terapeuta se reúne personalmente con el paciente en su oficina de Nueva York, en donde cada consulta llega a costar unos 450 dólares.
White creó su técnica inspirada por una de las teorías que aprendió como estudiante de psicología. Sin embargo, ella reclama que su “terapia” no es aprobada por las asociaciones de salud mental y admite que no es una terapeuta con licencia. Pero no por eso menos efectiva. A través del poder de la excitación la psicóloga ha conseguido que sus pacientes revelen sus problemas con más facilidad.
“Para los hombres en particular, que son menos propensos que las mujeres a ir a terapia, es más interesante, más atractivo, más emocionante. Es un enfoque más inspirado a la terapia. Sentí desde el principio que algo le faltaba a la terapia clásica, que parecía alentar la represión en lugar de animar a la gente a abrirse”, declaró la bella terapeuta a New York Daily News.
Sarah tiene 30 clientes que son una mezcla de estudiantes universitarios con problemas sexuales, hombres de mediana edad con problemas de relación, e incluso un par de mujeres que han disfrutado de sesiones chat desnudas con algún compañero.
Fuente: ElArgentino.Com
Foto: Archivo.
